Política de Calidad

La Fundación Iniciativa Solidaria Ángel Tomás es una organización transformadora de la sociedad, de los elementos que generan desigualdades y exclusión, y reconocida por su capacidad de denuncia de estas situaciones y de defensa de la justicia social. Actúa desde el compromiso social y cuenta con la participación activa y el protagonismo de las personas destinatarias y de las comunidades donde está presente. Colabora con otros agentes sociales, administraciones y organizaciones que se comprometen en este mismo camino y que la consideran una institución transparente en la que pueden confiar.

La Fundación Iniciativa Solidaria Ángel Tomás es un instrumento a través del cual la Inspectoría María Auxiliadora da respuesta a su misión de atender a “los últimos”, y una organización que destaca por ser referente para estas personas, por su capacidad de acogerlas, de saber identificar sus necesidades; por facilitarles herramientas para que construyan su proyecto de vida; por lograr que se encuentren en un entorno seguro, con un modelo de relaciones interpersonales basadas en el buen trato, el respeto mutuo y la no discriminación. Está integrada en la estructura inspectorial y mantiene la colaboración con los otros ambientes de cada obra salesiana.

La Fundación desarrolla su misión en comunidades educativo-pastorales y  cuenta con equipos de personas profundamente vinculadas a ella, personas que conocen y viven el carisma educativo salesiano, vocacionadas para construir un mundo mejor, formadas y preparadas para responder a la misión de la organización con profesionalidad, altruismo, flexibilidad, adaptación, participación e implicación.

IDENTIDAD

• Identidad cristiana y estilo salesiano. Somos una entidad cristiana, identificada con el modelo de persona y la imagen de Dios de Jesús de Nazaret, y ofrecemos a la sociedad el mensaje liberador del Evangelio, según el estilo de Don Bosco. Ésta es la dimensión más profunda de nuestra misión educativa, que llena de intención pastoral todas nuestras actuaciones, armonizando el proceso educativo con la apertura al sentido trascendente de la vida y al crecimiento de la dimensión religiosa de la persona, independientemente de sus creencias, desde el respeto a la pluralidad religiosa, el testimonio que acompaña y la propuesta que invita y compromete.

• Educación preventiva e integral. Fundamentamos nuestra acción en el Sistema Preventivo de San Juan Bosco. Destacamos la personalización de las relaciones educativas mediante nuestra presencia significativa en medio de la infancia y la juventud vulnerable, la participación en sus vidas y la disponibilidad para estar con ellas. Confiamos en su capacidad de transformación y empoderamiento, tanto personal como social. Propiciamos un ambiente de familia, desde la creatividad, el optimismo educativo y la alegría;  desde la razón, el afecto y la esperanza. Optamos por una educación que desarrolle todas las dimensiones de la persona, poniendo en el centro de la acción educativa a las personas en situación de vulnerabilidad como protagonistas de sus vidas, acogiéndolas sin condiciones y ayudándolas a crecer mediante múltiples propuestas y posibilidades.

• Flexibilidad y orientación a las necesidades. Identificamos las necesidades y expectativas de las personas en situación de vulnerabilidad, y les ofrecemos las respuestas necesarias para que lideren un futuro de inclusión y oportunidades; procuramos la mejora continua en nuestras intervenciones y miramos de adaptarlas a las necesidades identificadas.

PERSONAS DESTINATARIAS

• Protagonismo y participación. Educamos a personas para que se impliquen en la sociedad como ciudadanas honradas y responsables, y para que procuren la construcción de un mundo más justo, fraterno y solidario. Para ello promovemos el protagonismo y la participación, generando confianza, estimulando la autonomía, delegando responsabilidades, implicándolas en la construcción de su proyecto de vida y en el funcionamiento de los servicios y proyectos.

• Compromiso con la infancia y la juventud en desventaja social y sus familias. Priorizamos la atención a la juventud e infancia en situación de mayor vulnerabilidad o riesgo de exclusión social, siguiendo la opción preferencial por estos colectivos que asume la congregación salesiana y que hemos convertido en la razón de ser de nuestra Fundación y de nuestros proyectos.

SOCIEDAD

• Compromiso en la transformación social. Respondemos con actuaciones eficientes a situaciones de sufrimiento y de exclusión. Queremos contribuir a la transformación social de las causas que provocan tales situaciones, favoreciendo la implicación y la participación ciudadana, de entidades y de instituciones. Promovemos una cultura de solidaridad y justicia que también transforme a las personas que se relacionen con la Fundación, haciéndolas sensibles y dispuestas a generar alternativas.

• Una comunión al servicio de la misión. Actuamos a través de comunidades educativo-pastorales, orientadas a la educación de los jóvenes. Comunidades, porque implican, en clima de familia, a jóvenes y adultos, familias y equipos educativos; educativas, porque colocan la preocupación por la promoción integral de los jóvenes en el centro de sus proyectos, relaciones y organizaciones; pastorales, porque realizan una experiencia de Iglesia, y porque en ellas los jóvenes experimentan los valores de la comunión humana y cristiana con Dios y con los demás.

• Implicación en el territorio y trabajo comunitario. Actuamos desde estructuras eminentemente locales, que denominamos plataformas sociales. Desde cada barrio, pueblo, ciudad en los que estamos presentes, identificamos las necesidades, que abordamos en nuestros proyectos; desde las comunidades educativo-pastorales construimos las respuestas más adecuadas para transformar la realidad, en colaboración con entidades y servicios del territorio.

EQUIPOS

• Participación y corresponsabilidad. Don Bosco quería junto a sí a todos los que compartían la misión de trabajar en favor de la juventud pobre y abandonada y de estar a su servicio. Esta es la tradición que hemos heredado en Don Bosco Salesianos Social: un carisma que fomenta, en todas las personas integrantes de la comunidad educativa, la participación, la corresponsabilidad, el trabajo en equipo, el crecimiento personal y la creación de un ambiente que hace que se sientan como en familia. Crecer en corresponsabilidad requiere formación en el carisma para garantizar que la labor de Don Bosco se comparte y se asume como opción personal y de los equipos.

• Profesionalidad y vocación. Contamos con personas contratadas y voluntarias identificadas con los valores de la Fundación, con sentido vocacional, conscientes de que comparten un proyecto común, profesionalmente competentes y en constante actualización. Valoramos la implicación y participación en nuestros proyectos como signo de compromiso social. 

ORGANIZACIÓN

• Trabajo en red social y eclesial. Unimos fuerzas en favor de la promoción de las personas en situación de riesgo de exclusión. Impulsamos la cooperación con entidades e instituciones desde la apertura y la colaboración sistemática, procurando actuaciones corresponsables, coordinadas y complementarias. Participamos en redes y alianzas que transformen las causas de las injusticias y mejoren el servicio a las personas destinatarias y a su entorno. Como entidad cristiana, trabajamos en colaboración con la iglesia local, favoreciendo dinámicas de sensibilización, visibilización y denuncia de las situaciones de exclusión que se dan en nuestras realidades locales, y desarrollando proyectos conjuntos.

• Transparencia y sostenibilidad. Gestionamos nuestros recursos basándonos en la eficacia y la eficiencia. Nuestra gestión es transparente y, por lo tanto, pública y auditada, ya que consideramos nuestro deber explicar con detalle a nuestras colaboraciones (privadas o públicas) a qué destinamos nuestros fondos, qué hacemos con ellos, cómo y dónde; en todo momento buscamos la sostenibilidad de nuestras acciones a corto y largo plazo.