Por: FISAT

La I Jornada de Responsabilidad Social Corporativa e Inserción sociolaboral. (QRSC). Quiero Ser Social, organizada por la Fundación Ángel Tomás celebrada el jueves 26 de septiembre, en la sede del Ilustre Colegio de Abogados de Valencia (ICAV). Ha sido un encuentro financiado por la Conselleria de Transparencia, Responsabilidad Social, Participación y Colaboración, y en el que se han dado cita empresas, entidades del Tercer Sector y expertos en RSC.

El Director General de Responsabilidad Social, Josep Ochoa, quien inauguró la Jornada, valoró la importancia de promover este tipo de acciones para dar a conocer la RSC e impulsar su implantación. En este sentido, recordó que la Comunitat Valenciana ha sido la segunda autonomía en aprobar la Ley de Responsabilidad Social y sienta las bases para un cambio de modelo social y económico. La recién aprobada Ley promueve, entre otros asuntos, la contratación pública responsable.

La Jornada QRSC fue un encuentro de reflexión y de compartir experiencia para impulsar el conocimiento de la Responsabilidad Social Corporativa, un planteamiento estratégico en el que todos los agentes están llamados a actuar. Además de favorecer un acercamiento entre empresas y Tercer Sector; “pongamos el rostro más humano a la actividad económica”, instó Antonio Echeto, presidente de la Fundación Ángel Tomás.

Gracias a la participación de expertos de distintos ámbitos, la RSC fue analizada desde diferentes puntos de vista: la empresa, la administración pública y el Tercer Sector. Todos necesarios, tal y como resaltó Ester Muñoz, coordinadora de proyectos de inserción sociolaboral de Fundación Don Bosco para quien empresas y Tercer Sector deben funcionar como un tándem, “la situación de personas que están en situación de vulnerabilidad nos obliga a crear cauces; encontrarnos no era opcional”; y asignó a la Administración el papel de reguladora de este escenario.

Muñoz valoró la importancia de contar con la implicación de los diferentes tipos de empresa y de sectores; desde la pequeña empresa de barrio que puede propiciar esa primera experiencia laboral, pasando por la mediana empresa que posibilita un proceso de acompañamiento más estable, hasta la gran empresa, “todas son importantes para incorporar diferentes modelos y propuestas”.

Rafael Mossi, responsable de RSC de la Cámara de Comercio de Valencia, destacó también la importancia de la RSC para focalizar la estrategia de las empresas y la necesidad de cuidar las relaciones entre estas y sus proveedores, especialmente tras la ruptura producida con la crisis; “cuidando esa relación vamos a “capilarizar” muchos valores a las empresas que trabajan con ellas”.

Sobre la norma que regula la RSC, Mossi abogó por la capacidad y el motor de las personas frente a la obligatoriedad. “No por un mero cumplimiento hay un cambio radical”, “si no cala dentro, si no se aplica en el día a día, no sirve para nada”.

En este sentido se pronunciaron las empresas invitadas a la mesa redonda de buenas prácticas: Leroy Merlín y Lear Corporation. Daan Hirs, Director de Leroy Merlín Alboraya, explicó que con la estrategia de RSC de su compañía se había logrado implicar a 10.000 personas. Leroy Merlín ha creado un marco de RSE 2017-2021 para la gestión de impactos, basado en cuatro ejes: hogar, ética, sociedad y personas, y medio ambiente, a través de los cuales articulan distintas acciones encaminadas a cumplir con el lema de su plan de RSE, “Dar vida a un hábitat mejor”.

Por su parte, Begoña Herreros, directora de Recursos Humanos de Lear Corporation aseguraba que todo trabajador prefiere trabajar en una empresa que apoya a su comunidad. Y valoró el impacto positivo de acciones de RSC en la compañía, como la inclusión laboral de personas en situación de vulnerabilidad, “cuando trabajas con una persona en riesgo o en exclusión social, eso te hace aterrizar, nadie está fuera de ese riesgo”.

También sobre buenas prácticas, asociadas a la Universidad Politécnica de Valencia, Manuel Martínez Torán, profesor de la UPV y director de Fab Lab Valencia, explicó el proyecto Breakers, que apuesta por el empoderamiento de jóvenes en situación de vulnerabilidad, a través de la tecnología para construir su futuro.

Martínez Torán y la Fundación Ángel Tomás están buscando actualmente medios de financiación para poner en marcha una edición de Breakers-Fundación, para formar a los jóvenes en situación de vulnerabilidad en tecnología 3D.

El futuro de la RSC

Elena Ortega, auditora y especialista en RSC y Roberto Ballester, profesor de ética empresarial y responsabilidad social, analizaron el presente y el futuro de la RSC. Ortega señaló que la RSC debe dar respuesta a las demandas de la sociedad para hacer frente a los desafíos en materia de diversidad e inclusión, cambio climático, auditoría de la cadena de valor que garantice transparencia, productos y etiquetados éticos que favorezcan un consumo responsable; o un mayor activismo empresarial.

Ballester recalcó la importancia de dotarse de un marco ético para que la RSE alcance todo su potencial. “La RSE, asentada sobre una apuesta ética, genera confianza y reputación, en el medio y largo plazo, que son los activos principales para que el proyecto perdure”.

Sobre las relaciones entre empresas y Tercer Sector hubo consenso en cuanto a la evolución: de la desconfianza al entendimiento; y de la necesidad de establecer una relación ganador- ganador para que la relación sea de alto impacto.

Voluntariado Corporativo

Cristina Martínez, técnico de Sensibilización y Voluntariado de la Fundación Ángel Tomás, se apoyó en una dinámica visual para explicar el calado del voluntariado corporativo como herramienta transformadora de las empresas. “El voluntariado corporativo es apostar por la formación integral de los trabajadores y trabajadoras, no crear mejores empleados sino mejores personas, que repercute en un cambio positivo en sus vidas, en la propia empresa y por ende también en la sociedad”.

La inserción sociolaboral en directo con el Taller de Hostelería

En línea con la promoción de los programas de inserción sociolaboral, otro de los objetivos de la jornada QRSC, el Taller de Hostelería de la Fundación Ángel Tomás preparó el almuerzo para los asistentes. Fue una muestra del nivel profesional que se alcanza en este itinerario formativo y de la capacitación de los alumnos, que en última instancia, una vez finalizada la formación, aspiran a incorporarse al mundo laboral y para lo cual, la colaboración de las empresas para esa primera experiencia es fundamental.

ICAV, anfitriones de la I Jornada

El Ilustre Colegio de Abogados de Valencia (ICAV) cedió su espacio a la Fundación Ángel Tomás para la celebración de la Jornada QRSC. Pilar Colomer, miembro de la Junta de Gobierno del ICAV y responsable de la RSC, transmitió la satisfacción del Colegio por poder contribuir al desarrollo de la Jornada, colaborando con la Fundación y apoyando su misión tal y como han hecho en otras ocasiones. A través de la Fundación ICAV, el Colegio desarrolla diversas acciones dentro de su plan de RSC, destacando su programa de voluntariado profesional de atención jurídica gratuita. Además, la entidad dedica el 1 % de su presupuesto anual a entidades de carácter social.

La I Jornada de Responsabilidad Social Corporativa e Inserción sociolaboral. QRSC se enmarca dentro de las acciones de compromiso de la Fundación Ángel Tomás para divulgar la RSC e impulsar su desarrollo. Con este primer evento se ha querido crear un espacio de diálogo que favorezca la creación de alianzas entre los agentes participantes.