Equipo de RH en Positiu

En la IV Jornada «Quiero Ser Social» de FISAT conocerás las buenas prácticas en Responsabilidad Social de RH en Positiu. Un encuentro organizado por la Fundación Ángel Tomás- FISAT  y financiado por la Conselleria de Participació, Transparència, Cooperació i Qualitat Democràtica.

Por: FISAT

RH en Positiu es una asesoría de recursos humanos con un objetivo nada convencional: conseguir que las personas sean más felices a través de su vida profesional. Y no es un slogan bonito, es vocación social. Quieren darle la vuelta a la búsqueda de empleo y a la selección de personal poniendo a la persona en el centro.

 

RH en Positiu cree en el potencial de las personas, un valor compartido con FISAT que les ha llevado a unir fuerzas en la inserción sociolaboral de destinatarios y destinatarias con un bajo perfil de empleabilidad.

 

¿Qué es RH En Positiu?

RH en positiu es el sueño de cambiar la forma en la que buscamos y encontramos un empleo, convirtiendo este proceso en algo mucho más ágil y fácil.

Somos una pequeña startup de vocación social nacida en Vila-real. Actualmente trabajamos para entidades sociales y administración pública de toda la Comunidad Valenciana, impartiendo cursos y programas de formación ocupacional y organizando eventos que dinamicen el mercado laboral y conecten a candidatos y candidatas con empresas de la zona.

 

¿Qué os diferencia o tratáis que sea vuestra seña de identidad respecto a otras empresas asesoras en Recursos Humanos?

Si hay algo por lo que se nos reconoce de lejos, sin duda son nuestros foros de empleo. Son eventos con un altísimo impacto tanto mediático como social, y nosotros somos especialistas organizándolos.

Pero hay algo que me hace todavía más ilusión, y es que nuestra marca «cae bien». Tenemos una comunicación muy cercana, positiva y centrada en las personas. Pero no es marketing, es pura vocación social, es realmente creer en lo que haces. Y eso se transmite y se contagia.

 

¿Cómo surge este enfoque de filosofía de empresa?

Es más que una filosofía, es justo eso: vocación. Es hacer aquello en lo que crees, dedicarte a lo que te apasiona. Y a nosotros nos hace muy felices saber que todo el trabajo que realizamos y que todo el esfuerzo que ponemos (¡que no es poco!) tienen un valor muy grande.

Las empresas deben dejar de entender el dinero como un fin y comprender que es sólo un medio, que la verdadera finalidad de una empresa no es otra que mejorar la calidad de vida de las personas que la rodean. Que estamos aquí para hacernos la vida un poco mejor y dejar el mundo mejor de lo que estaba cuando nos lo encontramos. Cuando miras por el beneficio común ganas mucho más que cuando sólo miras por el beneficio propio.

 

¿Qué os aporta esta forma de entender el modelo de empresa?

Un propósito, una razón de ser. Esto es lo que da significado a tu día a día, el motivo que te da fuerzas para levantarte cada mañana y afrontar el día con positividad y alegría. Y todo esto es lo que te lleva a la plenitud, a poder dormir tranquilo por las noches, a sentirte orgulloso/a de tu trabajo. ¿Quién no desea esto?

 

La frase que os define es “Más Humanos que recursos” y la felicidad laboral un objetivo. ¿En qué se basaría la “felicidad laboral”?

Para nosotros, la felicidad laboral tiene dos pilares fundamentales, y no son tan raros o extraños como uno se pueda imaginar. El primero de ellos consiste en incorporar los valores a los procesos de selección de las empresas, de modo que las candidaturas vayan mucho más allá de la simple experiencia profesional o de la formación; que sea importante también compartir la misma visión y filosofía, que tanto empresa como candidatos estén alineados en valores y compartan vocación.

Por otro lado, la felicidad laboral es un cambio de liderazgo que se centra en las personas de la organización. Este punto es más complejo de resumir, pero básicamente consiste en entender que una empresa no tiene ningún valor sin las personas que la forman. Por eso es importante darle el valor justo y necesario a cada persona, escuchar y atender sus necesidades y trabajar para ellas. Involucrarlas, hacerlas partícipes de las decisiones estratégicas, ilusionarlas con cada proyecto. Cuando el equipo es feliz haciendo lo que hace, las cosas sólo pueden salir bien.

 

«Si hay algo por lo que se nos reconoce de lejos, sin duda son nuestros foros de empleo. Son eventos con un altísimo impacto tanto mediático como social, y nosotros somos especialistas organizándolos».

 

¿Cómo ayudáis a las personas en vuestros foros de empleo?

Imagínate estar buscando empleo y acudir a un evento donde puedes entrevistarte con decenas de empresas de tu entorno y presentar tu candidatura a cientos de ofertas de trabajo. Imagina que, en sólo una mañana, has podido entrevistarte con más de 10 empresas.

Imagina también que, además de entrevistarte, puedes también participar en talleres para mejorar tu búsqueda de empleo, preparar bien tu currículum, afrontar la entrevista de trabajo y conocer los recursos de tu entorno. Y que, además, durante la misma mañana, puedes recibir asesoramiento y orientación por parte de entidades expertas.

Pues este es el resumen de nuestros foros de empleo: eventos muy dinámicos pensados para generar oportunidades de trabajo reales.

 

¿Qué resultados obtenéis con los foros de empleo? ¿Por qué son útiles y necesarios?

Son útiles porque agilizan muchísimo todos los procesos, los hacen mucho más cortos, cómodos y rápidos.

Entre el 15 y el 25% de los asistentes está consiguiendo un empleo en nuestros últimos foros. Esto es una barbaridad, es un ratio altísimo. Y obtiene estos resultados porque humanizamos muchísimo la búsqueda de empleo: dejamos de ser un mero currículum, un papel dentro de un buzón, para mostrarnos como lo que realmente somos.

Ya son más de 1.000 las personas que han encontrado un empleo en nuestros eventos.

 

Hablemos de la inserción laboral de personas en situación de vulnerabilidad. ¿Cómo puede una empresa prepararse para asumir este reto?

En realidad no hay ninguna empresa que no esté preparada, es únicamente una cuestión de concienciación y voluntad. Es entender de una vez que todos somos personas. Nadie está exento de sufrir una situación de vulnerabilidad y, aunque desde la comodidad de una empresa es fácil pensar que «como ahora me va bien, siempre me irá bien», todos estamos expuestos.

Pero la situación de vulnerabilidad no es algo que se elige ni tampoco es permanente. Y, en cualquier caso, atravesar una situación de vulnerabilidad no implica ser peor profesional o no ser apto para el mercado laboral. Esa persona bien podría ser un familiar, un amigo o un ser querido. Nuestras empresas necesitan abrir los ojos y dejarse de tanto prejuicio.

RH en Positiu colabora con FISAT en formación

¿Cómo habéis colaborado con FISAT?

Hemos tenido el gran honor de poder impartir formación ocupacional con cursos muy prácticos y concisos que ayudan a mejorar enormemente la empleabilidad de los alumnos. Cursos especializados que aportan un alto valor diferencial a nivel curricular, especialmente en sectores tan demandados actualmente como el de la limpieza y desinfección, la logística o el sector comercio. Los alumnos reciben una formación teórico-práctica que les acerca muchísimo al mundo laboral.

¿Cómo ha sido vuestra experiencia en la línea de inserción laboral con FISAT?

Fantástica. En nuestro caso colaboramos con el programa Somos Parte de Burriana y las técnicas del programa son auténticos soles. Compartimos valores, pasión y compromiso, y entonces todo fluye.

Arantza, Marta y Alba son personas excepcionales y absolutamente volcadas por el proyecto, siempre con una sonrisa en la cara, con una plena vocación de servicio y pasión por ayudar. Lo dan todo. Y, así, las cosas sólo pueden salir bien. Para nosotros es todo un placer trabajar con ellas.

A la hora de colaborar con una entidad social ¿qué valoráis?

Que sea una entidad social ya es más que importante, ¿no? 

En la inserción sociolaboral, ¿qué necesitáis de la entidad colaboradora para que la experiencia tenga éxito?

Que no sea postureo, aunque muy pocas lo son. Necesitamos entidades llenas de valores, con fuerte compromiso y con pasión por lo que hacen. Por suerte, la mayoría de las entidades con las que trabajamos son así. Creo que, quienes nos dedicamos a lo social, necesariamente lo hacemos por vocación. Y, con eso, compartimos visión y filosofía, y las cosas salen solas. Trabajar en red, colaborativamente, para ayudarnos entre todos, que todos tenemos la misma finalidad. Somos aliados y estamos juntos en esto.